Mientras en Argentina el espionaje es cool
"Cinco hombres, uno de los cuales afirma ser un antiguo empleado de la CIA, fueron detenidos ayer sábado, a las 2.30 horas de la madrugada cuando intentaban llevar a cabo lo que las autoridades han descrito como un plan elaborado para espiar las oficinas del Comité Nacional del Partido Demócrata en Washington". Esta breve noticia publicada sin más comentarios el 18 de junio de 1972 en el diario The Washington Post, y en la que pocos lectores repararon, cayó como una bomba a pocos metros de la redacción: en el Despacho Oval, la oficina principal del presidente de los Estados Unidos. Para Richard Nixon era el principio del fin.
https://historia.nationalgeographic.com.es/a/escandalo-watergate-espionaje-presidencial-estados-unidos_15421
Nos cansamos de ver series y películas donde se comenta irónicamente la caída de Nixon, tanto que sin conocerlo nos hemos reído mil veces de las burlas por su corrupción que hoy se podría traducir en una suerte de cancelación de por vida pero pocos reparamos en lo que hizo y menos aún en su analogía nacional argentina. Un país literalmente espiado por la derecha a partir del macrismo en la ciudad, luego en la nación y finalmente se instaló el método de control social como una herramienta de disciplinamiento político de la derecha. Todo justificado, al parecer, porque los peronistas son muy malos (sic) y aceptado en la supuesta seguridad de que "a mi no me va a pasar" pero como hemos visto y sabido se han infiltrado instituciones, funcionarios, familias, no hay límite para la "curiosidad" voyerista de nuestro prohombres (y promujeres).
Pero no nos indignemos, la cabeza en el frasco es un malo de otros lares, acá quienes hacen lo mismo o cosas peores son nuestros campeones.
Así estamos.Ixx, abr22