Covid 19 ¿Exito o fracaso?
La lucha contra el covid suscita amores y odios pero particularmente oportunidades, aunque desleales pero ¿A quién le importan unos cuantos miles de muertes cuando se trata de una guerra?
Argentina se encontró de cara a la pandemia luego de un gobierno neoliberal que dejó vacías las arcas del Banco Central, es decir que dejó al estado sin efectivo para gastos. También dejó un sistema sanitario más deteriorado de lo que ya estaba y si hay quienes adoran endilgar los males del país al peronismo (por eso de los setenta años y bla, bla...) también debe constar que la administración amarilla no hizo absolutamente nada por mejorar la estructura sanitaria sino todo lo contrario. La nueva administración debió reforzar rápidamente el sistema de terapias intensivas y prácticamente triplicó su capacidad en pocos meses, justamente esos primeros meses ganados gracias a la cuarentena.
Ya trancurridos los meses se oye a menudo la frase remanida: "la cuarentena más larga del mundo" y no solo aquí, sino que medios internacionales repiten con más o menos matices los "cables" que les envían sus asociados desde acá. Muchos de los países donde se radican esos repetidores ya atraviesan la segunda ola de contagios con severas restricciones y muchas dudas porque, hay que decirlo, a muchos les gustó desprestigiar y menospreciar a la OMS por sus idas y vueltas, pero en verdad nadie sabe qué hacer frente a una pandemia de características variables y poblaciones susceptibles y moldeadas en la posverdad, escépticos, rebeldes o ignorantes, da lo mismo cuando los países democráticos no le encuentran la vuelta para alinear los intereses de todas sus poblaciones. Nótese que en sociedades disciplinadas parece que ha sido más exitoso el plan de contención aunque no es la regla como todo en este asunto. También ayuda ser rico, ser una isla o tener un clima particular. No se trata de excusas sino de diferencias.
Pero volvamos: ¿Fracasó la cuarentena argentina? ¿Qué pasa si se la compara con países que tienen sus economías tan dañadas como la nuestra? Porque nos gusta pensarnos a la cabeza del primer mundo a la hora de las críticas pero jamás a la hora de pagar impuestos o respetar reglas. ¿Nos vamos a comparar con Ecuador o Perú con sus manejos calamitosos y escenas realmente tenebrosas? ¿O vamos a compara con Italia con su aceleración inicial que desbordó todo control y prevención? Nos queda España con cadáveres en una pista de hielo o Brasil donde se cavaron sepulturas como si fuera una producción serial de servicios mortuorios. Acaso es comparable con EEUU y sus 42 millones de despidos repito: 42.000.000 de despidos!!!
Pero no hay caso, insistimos con mirar cualquier ejemplo que nos parece mejor ¿Nos comparamos con Nueva Zelandia o Noruega en un país donde nuestra ciudad más rica no tiene 6 mil netbooks para que todos sus alumnos hagan cursos remotos?
Los comunicadores nos hacen sentir que estamos en una burbuja, nos compararon con Suecia hasta que el modelo se cayó, luego con Israel que acaba de salir de su segunda cuarentena esta vez por un mes y podemos sumar y sumar ejemplos que son tomados parcialmente y con mirada miope, siempre mal intencionada.
Dije que en la guerra importan poco las pérdidas humanas y bien sabemos que aquí hay quienes jamás abandonaron su estrategia de guerra. Pero lo que no dicen y no dirán jamás es que sus enemigos son los propios argentinos, los que no piensan como ellos, claro, pero estamos en un país donde su fuerza aérea hizo su bautismo de fuego sobre la plaza principal de la nación y se enorgullecen de ello. Donde los dueños de la tierra se llevan sus ganancias al extranjero. Donde los jueces brindan el 4 de julio en una embajada extranjera.
Sea cual fuere el resultado de la cuarentena será contado como un fracaso por unos y será vivido como un logro por otros ¿De qué lado estamos?
ixx. oct20
