La #MarchaDeLosGolfistas o #1A
Al día siguiente de la marcha convocada en apoyo al gobierno que encabeza Mauricio Macri hay fuertes cruces en torno a la cantidad de manifestantes convocados que van desde los negadores 10 mil (circula un chiste muy ocurrente que juega con los 9 mil y pico del presidente) hasta los voluntarios 30 mil de la Federal. Y otra vez las portadas de los medios oficialistas que casualmente son los de mayores tiradas con sus amplias coberturas en oposición al desdén con que se tratan las marchas opositoras a Cambiemos. Todo esto orientado a la importancia de cuantificar, que es solo un aspecto. Habrá quienes puedan hacer sus especulaciones con las cifras pero si comparamos estás personas con las convocadas los días 6, 7, 8 y 24 de marzo que no bajaron de decenas de miles en cada una en los cálculos más austeros debemos preguntarnos cual es el valor de juntar tantos ciudadanos. Merecen atención diez mil o cien mil porque todos son representativos de una porción de la sociedad y de una opinión en particular en cada caso. El 24 de marzo se reclamaba por el respeto a los derechos humanos y el 1 de abril por la democracia en apoyo al presidente. No desluce las demandas que haya uno que otro exabrupto entre los manifestantes o aún entre los oradores porque a los epítetos subidos de tono de Hebe el 24M bien se pueden contraponer los prejuicios y descalificaciones del presidente en su mensaje a los manifestantes con agresiones para el resto. Los deslices forman parte de este tipo de convocatoria pero no las definen en su totalidad, hay que aprender a convivir con ellos y no caer en falsos purismos que serían lisa y llanamente paralizantes.
La marcha de ayer se jactaba de espontánea y no lo fue, se utilizó todo el aparato comunicacional paralelo de Cambiemos para difundirla y promocionarla, no está probado ni descartado que hubiera gente llevada en micros y si así fuera, no está mal pero uno de los puntos del llamado era ir "sin micros" como si esto tuviera importancia más allá de la diferenciación que se pretendía del verdadero objetivo de la marcha que era dar un mensaje de fuerza al kirchnerismo. Y al respecto también se consignaba "sin choripanes" "ni banderas políticas" ambos símbolos de toda convocatoria peronista.
Si algo podemos criticar en este llamado es la diferencia entre las intenciones y las consignas y es allí donde pierde algo de valor la presencia en la plaza ya que van por una cosa pero dicen ir por valores superiores, esto deslegitima sin lugar a duda pero es un problema para los convocantes.
Los que brindaron su apoyo en la plaza saben que esto tambalea y deciden darle con su presencia la fuerza adicional que hace falta para seguir, es casi un grito desesperado de sectores que prefieren quedarse en casa, que no tienen el ejercicio de salir a manifestar mi rozarse con otros en la calle pero es un buen gesto democrático que ojalá se mantenga en el tiempo porque el mencionado hecho de ir sin banderas políticas oculta el prejuicio de qué es mala la política y esto tendrán que superarlo para sumarse a la vida democrática en nuestra sociedad. La creencia arraigada en esta gente es que todo lo que no sean ellos mismos es perverso y tendrán que mejorar ese concepto perticipando, jugando el juego de la democracia en todos sus órdenes, no solo en la plaza sino y más aún en la vida cotidiana. El respeto por las instituciones, las diferencias, la justicia y la convivencia serán las próximas pruebas a saldar.
Ixx, abr2017