Ya desde hace tiempo es más que evidente que hay sectores que operan desde el poder establecido (establishment) a través de sus brazos mediáticos y sus firmas encuestadoras en un círculo ¿virtuoso? de reproducción contínua y progresiva de sus propios deseos en la forma de opiniones independientes, desinteresadas, neutrales. Lo que sucedió con las recientes elecciones en Brasil es un claro ejemplo. Desde una de las principales usinas de opinión de la derecha que también opera en Argentina (la firma Ibope), se intentó instalar un avance progresivo de la opositora Marina Silva frente a la oficialista Dilma Rouseff en un intento por inducir la intención de voto de la población.
Las tapas de los periódicos argentinos de derecha iban reproduciendo esas tendencias no sin algo de complicidad. Digo esto último porque se ignoraron otras encuestas e inclusive se solicitaba la opinión de un "encuestador" como Durán Barba sin explicitar que el mismo operaba políticamente para la oposición, es decir que era parte interesada.
Los recortes de las notas hablan por sí solos. Tomar registro.
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| De acuerdo con esta nota es empate. |
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| Aquí se instala la posibilidad de triunfo. |
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| En esta nota se asevera el resultado. |
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| Y aquí... Ups! Sorpresa! La realidad se impone a la ficción. |
IXX-2014
