Y finalmente la gente eligió lo que quiso.
El sistema puso (un poco tarde tal vez) toda su maquinaria en funcionamiento para intentar frenar la aventura del caprichoso multimillonario pero no alcanzó. Primó el ánimo de la gente (esa entelequia) que comprendió en su día a día que la política no es la solución, de hecho se lo dicen a diario infinidad de mensajes que no paran de denostar a los políticos y responsabilizarlos de todo lo malo, bien he aquí el resultado, la profecía cumplida y aquello que los estadounidenses han impulsado e impuesto en tantos gobiernos subordinados se materializó en sus propias narices. El electorado optó por la antipolítica como alternativa a lo de siempre.
Las implicancias políticas y económicas de esta nueva etapa son aún impredecibles pero algo es cierto y es que el llamado de atención desde lo social hará que se modifiquen muchos aspectos comunicacionales de cara a los votantes que pasan a tener un nuevo rol en la principal potencia del mundo, luego habrá que ver su impacto en el resto de los países.
Cerramos con una frase pergeñada en el corazón mismo del capitalismo neoliberal actual: "si sucede, conviene". Habrá que ver.
IXX, nov2016
Aquí vemos una explicación más racional donde se observa que entre otras cosas los salarios no crecieron aunque el PBI per cápita sí lo hizo, entonces ¿adonde va el dinero?
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